Durante cuatro días, incluyendo este fin de semana, la escuela Delia Ibarra en Santa Rosa fue el escenario del trabajo creativo de 12 estudiantes y cuatro docentes de la escuela de arquitectura de la Universidad Internacional del Ecuador. Ellos y ellas tuvieron la oportunidad de plasmar su creatividad en la construcción de juegos interactivos para la escuela. El grupo, invitado por FUNDAR-Galápagos, juntó sus energías para inventar juegos, como “sube-y-bajas”, resbaladeras y laberintos, los cuales fueron construidos a partir de materiales de desechos como llantas usadas y botellas plásticas. Uno de los requisitos era que los juegos educativos debían ser seguros para los niños y amigables con el medio ambiente de Galápagos.